Intervención del Fonoaudiólogo

 Todo aquel que utiliza su voz como herramienta de trabajo, si no adquiere una adecuada técnica vocal, es posible que con el tiempo padezca de disfonías, ocasionadas por distintas patologías, como por ejemplo, nódulos, pólipos, úlceras de contacto, hiatus, etc.

El encargado de realizar la reeducación es el profesional Fonoaudiólogo.

Como primera medida, se trata de corregir la respiración.Adquirir el tipo costo-diafragmático es lo ideal, ya que con ello se evita el daño vocal, y fatiga general del organismo.Es importante tener presente esto ya que con una buena respiración se logra en consecuencia, la relajación muscular de la zona cervical y laríngea, permitiéndo que la voz salga, potente , clara y con fluidez. De este modo se evitan las contracturas. Otro punto importante a tener en cuenta es la coordinación y dosificación del aire que se usa para hablar. No olvidar que hablamos con el aire que sale de nuestro organismo, y en este caso es de suma importancia aprender a graduar el soplo , para no quedarnos sin aire  y poder terminar una frase cuando hablamos ,sin producir un golpe de glotis, tan dañino en nuestro aparato vocal.

Otra sugerencia para aquellas personas acostumbradas a hablar de corrido, es la utilización de pausas, una buena pronunciación ayuda a emitir las palabras con mayor claridad. En el caso del disertante, orador, comunicador, hay técnicas específicas para que el discurso no sea aburrido. El tema puede ser interesante, pero si no se materializa a través de una voz potente, con matices, y brillo, no llega al interlocutor con el espíritu que el texto pretende expresar.